La Academia Salvadoreña de la Historia es una institución correspondiente a la Real Academia de la Historia de España, fundada a finales del mes de enero de 1922, gracias a la iniciativa y gestiones de Ismael G. Fuentes, quien era encargado de Negocios de la Legación de El Salvador en España.
El 3 de febrero de ese mismo año, en San Salvador se nombraron los primeros académicos correspondientes, entre quienes estaban, además de Ismael Fuentes, Alberto Luna, quien fue electo director, Juan Ramón Uriarte, nombrado secretario, y los señores Víctor Jerez, Pedro Salvador Fonseca, Mons. Ricardo Santiago Vilanova, Francisco Castañeda, entre otros

El 30 de enero de 1925, en asamblea general de miembros fueron aprobados los primeros estatutos de la institución, los cuales fueron publicados en el Diario Oficial del 5 de febrero de 1925, en el tomo 98, número 30.
Desde esas fechas a los años recientes, la Academia ha construido una larga trayectoria como figura institucional en la producción y la difusión de la Historia salvadoreña.

Desde el año 2004 cuenta con una biblioteca especializada en La Casa de las Academias, sede compartida con la Academia Salvadoreña de la Lengua. En esta sede se encuentran las oficinas administrativas, salas de reuniones y la biblioteca, en la cual se encuentra el acervo bibliográfico y hemerográfico, y además, la sección de archivos que conserva fondos documentales y un archivo oral.
La Casa de las Academias, se encuentra en el centro histórico, es una edificación con un estilo arquitectónico de finales del siglo XIX y principios del siglo XX, originalmente propiedad de la familia Dueñas, conocida como la Casa Dueñas, y que durante mucho tiempo estuvo abandonada. En el año de 2004, ya reconocida como patrimonio histórico arquitectónico nacional, fue restaurada por CONCULTURA, con apoyo de la Cooperación Española; intervención que también consistió en la construcción de un anexo, de estilo moderno, para albergar las bibliotecas de las dos Academias.